Hoy me ha dado un vuelco el corazón al enterarme de que Howard Gardner un eminente y reconocido psicólogo, profesor e investigador de la universidad de Harvard ha sido premiado con el Príncipe de Asturias en ciencias sociológicas. Y diréis ¿porqué?:
Hace montones de años cuando terminé mi carrera y decidí quedarme en la facultad haciendo la tesis doctoral con el profesor Juan Carlos Arañó en el departamento de didáctica de la expresión plástica, le planteé que estaba interesada en trabajar sobre creatividad. El tema era gigante, y no tenía  claro cual sería finalmente mi línea de trabajo, pero mientras lo encontraba Juan Carlos me ofreció una mesa en el departamento, me plantó dos grandes pilas de libros y me dijo que empezara a leer. La mayor parte estaba en inglés y pensé morir, pero allí me senté tarde tras tarde, día tras día como una hormiga, y fui poco a poco haciéndome con ellos. Un mundo de pensadores, e ideas ilusionantes me llenaron la cabeza y unos de los autores que empecé a adorar fue ha este señor y a su amigo Eliot Eisner al que  pude conocer en un congreso mundial sobre creatividad que se celebró en Madrid en 1993.
Dos de las obras de Gardner :  «Mentes Creativas» (Mentes creativas. Una anatomía de la creatividad vista a través de las vidas de S. Freud, A.Einstein, P. Picasso, I. Stravinsky, T.S. Elliot, M. Graham, M. Gandhi, Paidós, Barcelona, 1995) y Arte Mente y Cerebro (Arte, mente y cerebro. Una aproximación cognitiva a la creatividad, Paidós, Barcelona, 1997), se convirtieron para mí en una especie de biblia.
La teoría por la que este señor es más conocido y que ha supuesto un cambio en los modelos educativos es la teoría de las inteligencias múltiples en la que se  explica que la inteligencia de cada persona está compuesta por lo menos de ocho inteligencias o habilidades cognoscitivas. Estas inteligencias trabajan juntas, aunque como entidades semiautónomas. Cada persona desarrolla unas más que otras. Copio literal de la wikipedia para no enrrollarme: «Para Gardner, la inteligencia natural [IQ] no es un sustrato idéntico de todos los individuos, sino una base biopsicológica singular, formada por combinaciones de potencialidades múltiples que no siempre se despliegan como consecuencia de una educación estandarizada que no distingue los matices diferenciales del individuo»

 

Según esto, resultan ridículos por obsoletos muchos de los patrones de pensamiento que SIGUEN EN VIGOR EN NUESTROS CENTROS y que defienden a ultranza que unos conocimientos son más válidos o superiores a otros, y que por eso hay que darles mucha más importancia en los curriculos  etc etc… ¡HABLANDO EN PLATA SEÑORAS Y SEÑORES!: esos comentarios que todos tenemos que soportar aún de que «las mates son mucho más importantes que la Plástica que no sirve «pa na».
En fin, que hoy me he sentido muy feliz de ver como se reconoce la obra de este investigador genial.
Sacad este tema de conversación mañana durante cafelito en el IES  a ver que pasa. Lío A-SE-GU-RA-DO