A los humanos nos encanta dibujarnos, pintarnos, representarnos con un material u otro. Es algo inherente a nosotros, dejar huella. Desde las cavernas hasta nuestros días los artistas reflejan en sus obras nuestros cuerpos y rostros, ilustran escenas de nuestras vida cotidiana y lo hacen con las más diversas técnicas y estilos. Cada artista elige una manera personalísima de hacerlo, reflejando con fidelidad los detalles de la realidad o huyendo poco a poco de ellos para encontrar más la esencia, la personalidad, la fuerza o los sentimientos de lo retratado. En cada cultura a lo largo de la historia han existido patrones o formas particulares de representar la figura.humana.
Observa estas imágenes. Seguramente creerás  que sólo una de ellas está bien proporcionada pero eso es sólo porque tu ojo se ha educado en la proporción del Canon griego y romano. En nuestra cultura ese ha sido el Canon considerado correcto pero es sólo eso. Un canon, una regla. La real academia define en su tercera acepción el canon como: regla de las proporciones de la figura humana, conforme al tipo ideal aceptado por los escultores egipcios y griegos (http://lema.rae.es/drae/?val=canon)

 

Escultura de bronze del regne de Benin,
del segle XVI o finals del XV
Gran Buda de Bronce en Tokio
Atenea Lemnia, de Fidias

El canon se ve influido por creencias religiosas, antropológicas y estéticas. Cada sociedad considera ideal un determinado canon o proporción pero siempre es fruto de la observación y como las constituciones anatómicas de los humanos varían de unas culturas a otras el canon también varía.

He encontrado en el blog comocubriruncuerpo.org un buen resumen de los principales cánones griegos:

  • Según la tradición se dice que el escultor griego Policleto del siglo V a.C., fue el primero que esculpió una figura empleando una proporción basada en la medida de la cabeza repetida 7 veces y medias para la medida total del cuerpo, en su obra denominada el Doríforo, con la intención de crear un ideal de perfección que otros imitaran después.

 

 

  • Igualmente valorado es el canon de otro griego Lisipo del siglo IV a.C, en donde ofrece una idealización del cuerpo humano que le da una mayor esbeltez, la cual la altura del cuerpo es igual a 8 cabezas.

 

  • Cuando el canon sobrepasa las 8 cabezas para la altura total del cuerpo humano determina unas proporciones más propias de héroes y semidioses, que de gente normal; como es el caso de la célebre estatua Apolo de Belvedere,de Leocares de 8 cabezas y media.

 

Una de las imágenes más famosas sobre la proporción del cuerpo humano es el Hombre de Vitruvio de Leonardo da Vinci. Leonardo hizo un estudio en profundidad de la figura humana, para demostrar qué partes fundamentales guardan relación con la Sección Áurea.
Para los griegos la unidad de medida para el canon era el puño. para ellos el cuerpo armónicamente proporcionado debía tener 18 puños.

En este curioso gráfico representa la relación entre el número de cabezas y la proporción más ideal:

PROPUESTA DE ACTIVIDAD:
Hemos visto que el canon de belleza varía de unas culturas a otras y de unas épocas a otras pero todos son fruto de la observación de la realidad. De medir con los ojos y establecer relaciones entre unas parte y otras del cuerpo.
Vamos a dibujar un retrato del natural. Dibujarás a tu compañera/o y él a ti. Para conseguirlo lo único que tienes que hacer es aprender a ver y a medir estableciendo  relaciones entre las parte de la cara y cabeza. Yo te ayudaré durante la hora de clase guiándote mediante pistas enseñándote a ver y no sólo mirar. Luego puedes repetir lo aprendido en clase delante de un espejo para hacerte un autoretrato.
Te dejo aquí algunos ejemplos de otros compañeros para que veas lo bien que te va a quedar: